El Tribunal de Krasnodar envía a un profesor de música con discapacidad a una colonia penal por su creencia en Dios

El 4 de febrero de 2025, el Tribunal de Distrito de Sovetskiy de Krasnodar condenó a Aleksey Lelikov, de 64 años, a 6,5 años de prisión. La magistrada Irina Klyuyeva consideró que la celebración de reuniones de adoración de los testigos de Jehová era organizar las actividades de una organización extremista. El creyente fue detenido en la sala del tribunal.

"No puedo estar de acuerdo en admitir mi culpabilidad y llamarme a mí mismo un extremista, incluso en aras de la ganancia", dijo Lelikov en su última declaración, "porque entonces significaría que el culto a Dios es un crimen. Para mí, esto equivale a una negación de Dios y de su hijo Jesús, que son ajenos al extremismo en cualquier manifestación".

El FSB abrió una causa penal contra Lelikov, un músico hereditario y finalista del concurso Maestro del Año, hace tres años. Su casa fue registrada y el creyente y los miembros de su familia fueron interrogados. Pronto el nombre de Lelikov apareció en la lista de Rosfinmonitoring, y la casa y el terreno que pertenecían al hombre fueron confiscados. En abril de 2022, debido a un deterioro de las funciones motoras, Lelikov recibió el segundo grupo de discapacidad.

Los cargos de extremismo presentados contra el creyente se limitan a la organización de espectáculos y servicios religiosos y al estudio de la literatura religiosa. "Era difícil leer una acusación con tantas mentiras", comentó Lelikov. "No esperaba que estas palabras fueran como veneno" La acusación se basó en grabaciones de servicios de adoración. Las audiencias del caso, que comenzaron en febrero de 2023, revelaron que los exámenes de estas grabaciones contenían contradicciones e inconsistencias, lo que llamó la atención de la defensa.

En el territorio de Krasnodar, 38 testigos de Jehová ya han sido objeto de discriminación religiosa. Por el momento, otros 17 creyentes, entre ellos siete mujeres, defienden sus creencias en los tribunales.

En junio de 2022, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos dictaminó poner fin a la represión de los testigos de Jehová en Rusia. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos declaró ilegal el enjuiciamiento penal de los creyentes y pidió a las autoridades rusas que liberaran a los prisioneros.