El tribunal de la ciudad de Kazán envió a Sergey Gromov a una colonia penal durante seis años por celebrar reuniones religiosas
TartaristánEl 14 de septiembre de 2023 finalizó el examen del caso del testigo de Jehová, Sergey Gromov, en el Tribunal de Distrito de Moskovskiy de la ciudad de Kazán. El juez Alsu Gumirova lo declaró culpable de extremismo y lo condenó a seis años y un mes de prisión por practicar pacíficamente su fe.
La culpabilidad de Gromov, según la investigación, es que "llevó a cabo reuniones religiosas" en su casa. Aunque el Tribunal Supremo de la Federación de Rusia dictaminó que los servicios de culto en sí mismos no son un delito, el investigador, seguido por el juez, equiparó la celebración de esas reuniones con la organización de las actividades de una organización extremista. El fiscal pidió condenar a Sergey a ocho años de prisión. El creyente se considera inocente y puede apelar el veredicto.
Gromov fue detenido junto con su esposa en marzo de 2022 en el aeropuerto Vnukovo de Moscú. También resultó que el día anterior un investigador del FSB había iniciado una causa penal contra él en virtud de la parte 1 del artículo 282.2 del Código Penal de la Federación de Rusia. Luego se registró el apartamento de los Gromov en la ciudad de Kazán. Desde el 17 de marzo de 2022, Sergey se encuentra en un centro de detención preventiva. Con el tiempo, también fue acusado de financiar las actividades de una organización extremista.
Según el creyente, los testimonios de testigos secretos en los que se basa este caso son falsos. La defensa está segura de que detrás de los seudónimos se esconden el oficial del FSB Mikhail Vasilyev y Aleksandr Komzolov, quienes muestran una actitud negativa hacia los testigos de Jehová. Gromov explicó en una de las audiencias judiciales que no había estado en contacto con Komzolov desde 2014, lo que significaba que no podía saber nada sobre su vida religiosa desde entonces. El juez desestimó las preguntas del abogado destinadas a identificar contradicciones. El segundo testigo, según el acusado, relató "hechos inexistentes" sobre su conocido. El tribunal no trató de establecer si hubo una calumnia por parte de los testigos de cargo.
En total, 13 testigos de Jehová ya han sido procesados en la República de Tartaristán. Once de ellos fueron condenados por su fe, Konstantin Sannikov recibió seis años y medio de prisión. Los activistas de derechos humanos se oponen a esta posición de los agentes del orden público y piden a Rusia que ponga fin a la persecución de los testigos de Jehová.
