Un tribunal de Rubtsovsk envió a Andrey Danielyan, de 53 años, a una colonia penal durante 6 años por tener discusiones bíblicas

El 7 de noviembre de 2022, el juez Aleksey Bezrukov del Tribunal de la Ciudad de Rubtsovsk del Territorio de Altái decidió que leer y discutir la Biblia era extremismo, declaró culpable a Andrey Danielyan y lo condenó a 6 años de prisión en una colonia penal de régimen general. El creyente fue detenido en la sala del tribunal.

La adoración conjunta de Dios con otros creyentes fue interpretada por la fiscalía como una actividad ilegal con intenciones delictivas. Aunque no hay una sola víctima en el caso, el fiscal pidió al tribunal que condenara a Danielyan a 7 años de prisión. La sentencia no ha entrado en vigor y puede ser recurrida. El creyente insiste en que es completamente inocente.

En mayo de 2021, los agentes encargados de hacer cumplir la ley llevaron a cabo una operación especial en el territorio de Altái, con el nombre en clave de "Armagedón". A las 6 de la mañana, agentes del FSB entraron en el apartamento de Andrey Danielyan y abrieron la puerta con su propia llave. Resultó que el teléfono del creyente estaba intervenido y se había accedido a la información de su computadora personal. Después del registro, Andrey y su esposa fueron interrogados en el departamento de investigación. Dos días antes, se había iniciado una causa penal contra Danielyan por el cargo de participar en las actividades de una organización extremista. Más tarde, el investigador Zavorin reclasificó la acusación a la Parte 1 del Artículo 282.2 del Código Penal de la Federación de Rusia: organizar las actividades de una organización extremista. El creyente pasó casi un año y medio bajo un acuerdo de reconocimiento.

El caso llegó a juicio después de poco más de un año de investigación. Después de cinco sesiones, el tribunal entró en la etapa de alegatos finales. Danielyan señaló numerosos ejemplos de falsificaciones, inexactitudes y prejuicios contra los testigos de Jehová; por ejemplo, una de las expertas, Mirra Kashaeva, profesora asistente de la Universidad Estatal de Altái, expresó estereotipos erróneos sobre los testigos de Jehová. El creyente estaba perplejo: "Con base en la acusación, uno podría concluir que está prohibido predicar, orar, discutir temas espirituales y reunirse. ¿Puede todo esto constituir realmente un delito? ¿Y qué podemos hacer en virtud del artículo 28 de la Constitución de la Federación de Rusia? Esto plantea la pregunta, ¿cómo se supone que los creyentes deben adorar a Dios?" El tribunal y la investigación no vieron la diferencia entre un grupo de creyentes ordinarios (un grupo religioso), que no necesita registro, y una entidad legal que ya no existe en Rusia. Como resultado, cinco hombres que profesan la religión de los testigos de Jehová ya han sido procesados penalmente en el territorio de Altái. Además de Danielyan, el caso de Pavel Kazadaev está en los tribunales, y los otros hombres están siendo investigados.

El 28 de octubre de 2021, el Pleno del Tribunal Supremo de la Federación de Rusia dictaminó que los Servicios Divinos de los Testigos de Jehová, su realización conjunta de ritos y ceremonias, en sí mismos no constituyen un delito según el artículo 282.2 del Código Penal de la Federación de Rusia, a pesar de la liquidación de sus entidades jurídicas.