Rusia rechaza las demandas de indemnización de los testigos de Jehová ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos

En relación con la prohibición de actividades y la incautación de bienes, los testigos de Jehová presentaron 2 demandas ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos con un monto total de reclamaciones de indemnización de más de 6 mil millones de rublos (79.215.679 euros). En su respuesta enviada al tribunal el 7 de diciembre de 2018, la Federación de Rusia rechazó todas las reclamaciones materiales.

El monto consiste principalmente en el costo de los edificios de culto convertidos en ingresos estatales (los creyentes enfatizan que su principal demanda no es el dinero, sino la devolución de los bienes inmuebles). Así, un gran complejo de culto en el pueblo de Solnechnoye (San Petersburgo) por valor de unos 2.000 millones de rublos fue arrebatado a los creyentes. Rusia lo convirtió en su propiedad, pero lo niega ante el TEDH. ¿Cómo es posible?

El viceministro de Justicia de la Federación de Rusia, Mikhail Galperin, escribió al Tribunal Europeo: "Todos los bienes enumerados en el momento de la liquidación de la organización no pertenecían al Centro Administrativo de los testigos de Jehová en Rusia. En particular, según un certificado de Rosreestr, los bienes inmuebles enumerados en el párrafo 1 del Apéndice 18 pertenecen a la Sociedad Watch Tower, Bibles and Tracts de Pensilvania, una organización que no es demandante ante el Tribunal Europeo. En consecuencia, la denuncia del "Centro Administrativo de los Testigos de Jehová en Rusia" en relación con los bienes inmuebles del número 6 de la calle Srednaya en Solnechnoye, San Petersburgo, no está fundamentada y no está sujeta a satisfacción por el tribunal" (párrafo 8 de las Notas).

La posición de las autoridades rusas en el tribunal internacional entra en conflicto con su propia posición, pero en el tribunal nacional ruso. En diciembre de 2017, el estado apeló ante un tribunal nacional ruso, argumentando que la Sociedad Watch Tower en realidad no era propietaria del complejo de adoración, y que la transferencia de propiedad del "Centro Administrativo de los Testigos de Jehová en Rusia" a él en 2000 era una farsa. La decisión del tribunal del 7 de diciembre de 2017 dice: "El tribunal determinó que la transferencia directa por parte del donante de la cosa a la posesión, uso y disposición del donatario no tuvo lugar, las transacciones no se ejecutaron realmente". Como resultado, el tribunal declaró nula la transacción de 17 años de antigüedad , y el complejo fue objeto de embargo al Estado, como si aún perteneciera al "Centro Administrativo". (Anteriormente, durante la audiencia en la Corte Suprema de la Federación Rusa, la Sociedad Watch Tower solicitó intervenir en el caso debido al hecho de que sus intereses podrían verse afectados por la decisión de la corte, informó a la corte sobre la propiedad disponible en el territorio de Rusia, presentó una queja privada contra la negativa a involucrarse en el caso, e incluso un recurso contra la decisión judicial, pero fue en vano).

"Las artimañas del Ministerio de Justicia no parecen convincentes", dijo Yaroslav Sivulsky, de la Asociación Europea de Testigos de Jehová. Es triste darse cuenta de que Rusia "para la exportación" es tan diferente de Rusia para sus propios ciudadanos.

Una vez que Rusia presentó todas sus observaciones, las quejas se remitieron al tribunal. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos dijo que las consideraría prioritarias. Se espera un fallo.