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En Kirov, un nuevo caso penal por fe y el arresto de 5 ciudadanos, entre ellos un ciudadano polaco
Región de KirovEl 9 de octubre de 2018 se llevaron a cabo registros en Kirov en los domicilios de ciudadanos acusados de profesar la religión de los testigos de Jehová, así como de familiares que no comparten sus creencias. Fueron detenidas 5 personas, entre ellas un extranjero. Según los investigadores, la cuestión de la medida adicional de restricción para ellos debería decidirse el 10 y 11 de octubre de 2018.
La lista de detenidos incluye a Andrzej Oniszczuk, de 50 años (ciudadano de la República de Polonia que vive en Rusia), Vladimir Korobeynikov, de 65 años, Andrey Suvorkov, de 25 años, Yevgeny Suvorkov, de 40 años, y Maxim Khalturin, de 44 años. Durante los allanamientos en sus domicilios, se incautaron todos los dispositivos electrónicos. Las autoridades investigadoras registraron no sólo a los creyentes, sino también a sus familiares que no profesan la religión de los testigos de Jehová.
El caso fue iniciado por investigadores del Comité de Investigación en virtud de la parte 1 del artículo 282.2 del Código Penal de la Federación de Rusia (organización de actividades de una comunidad extremista) y la parte 1 del artículo 282.3 del Código Penal de la Federación de Rusia (financiación de actividades extremistas). El informe oficial de la investigación señala que los ciudadanos "organizaron reuniones de seguidores y participantes de esta asociación en diversos apartamentos en cumplimiento de las acciones características de esta asociación, expresadas en el canto conjunto de cantos bíblicos, perfeccionamiento de las habilidades de la actividad misionera, estudio de literatura religiosa, la llamada "Sagrada Escritura" (Biblia), que está incluida en la Lista Federal de Materiales Extremistas que Contienen Doctrina de los Testigos de Jehová".
Como puede verse, esta causa penal es consecuencia directa de la decisión del Tribunal de la ciudad de Vyborg de reconocer como material extremista la traducción de la Biblia al ruso moderno, que fue incautada en la aduana a los testigos de Jehová.
Después de que el Tribunal Supremo ruso liquidara y declarara "extremistas" a todas las organizaciones de los testigos de Jehová, los organismos encargados de hacer cumplir la ley de todo el país interpretan erróneamente las reuniones pacíficas de creyentes como "actividad extremista". Decenas de activistas de derechos humanos, así como el Consejo de Derechos Humanos presidido por la Federación de Rusia , expresan su preocupación por la creciente represión religiosa.