En Crimea, los testigos de Jehová volvieron a plantar materiales prohibidos e interrumpieron los servicios de adoración
CrimeaEl 2 de julio de 2016, agentes de la policía asistieron a una reunión religiosa de los testigos de Jehová en Alushta. Interrumpieron el servicio y "se apoderaron" de una bolsa de revistas de La Atalaya de un extraño que estaba presente en la habitación en ese momento.
La interrupción de los servicios religiosos es un acontecimiento extraordinario y una grave violación de los derechos y libertades de los ciudadanos, como dictaminó el Tribunal Europeo de Derechos Humanos en el caso Kuznetsov contra la Federación Rusa (2007) y luego reiterado en la sentencia en el caso Krupko contra la Federación Rusa (2014).